Descansa sólo en Dios, alma mía
Sólo en Dios descansa mi alma, porque de él viene mi salvación; sólo él es mi roca y mi salvación; mi alcázar: no vacilaré...
Sólo en Dios descansa mi alma, porque de él viene mi salvación; sólo él es mi roca y mi salvación; mi alcázar: no vacilaré...
Bendice, alma mía, al Señor, y todo mi ser a su santo nombre...
Dichoso el que, con vida intachable, camina en la voluntad del Señor; dichoso el que, guardando sus preceptos, lo busca de todo corazón...
En las tinieblas brilla como una luz el que es justo, clemente y compasivo...
Que mantiene su fidelidad perpetuamente, él hace justicia a los oprimidos, él da pan a los hambrientos...
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? (R) Una cosa pido al Señor, eso buscaré: habitar en la casa del Señor por los días de mi vida; gozar de la dulzura del Señor, contemplando su templo...